El silencio de los corderos - Thomas Harris

No soy de sagas o series de libros y eso lo he repetido ya en varias ocasiones, pero tal parece que este es el año en el que tengo que morderme la lengua porque me he dejado llevar por más de una, tal es el caso de Percy Jackson o La quinta ola. Pero la saga que hoy les traigo es una para un público más adulto que en verdad me tiene fascinada, aunque seguro para muchos de ustedes no supondrá ninguna novedad.

Esta historia es por demás conocida, tanto que sus personajes han trascendido para arraigarse directamente en la cultura popular, ya que, ¿quién no ha escuchado hablar de Hannibal Lecter? Las películas son por demás conocidas y muy bien valoradas y en la actualidad hay una serie que seguro que habrá cautivado a un público mucho más joven, pero yo de lo que les hablaré hoy, es de uno del primer libro de la serie escrita por Thomas Harris.

La historia

Este libro nos presenta dos asesinos en serie. Primero Búfalo Bill a quien aún busca la policía, un asesino de mujeres cuya particularidad consiste en quitarle a las victimas partes de la piel, incluso el cuero cabelludo. Y después como un secundario que pronto sale a destacar, tenemos a Hannibal Lecter, sentenciado a nueve cadenas perpetuas, temido canival y asesino.

Como protagonista del libro está Clarice Starling, estudiante de la sección de Ciencias del comportamiento del FBI en su último año, que de pronto es llamada por el jefe Jack Crawford para darle la oportunidad de entrevistar al psiquiatra Hannibal Lecter, algo muy poco usual, dado que la última persona que intentó sacar algo de él, casi no vive para contarlo.

Hay un breve encuentro con Hannibal a través del cristal de su celda con todas las precauciones posibles, no obstante esta primer entrevista no conduce a nada, o no lo haría, de no ser porque cuando Clarice se disponía a marcharse un compañero de celda de Lecter decide ensañarse con Clarice y hacerle una mala broma... por así llamarlo, el caso es que Hannibal, asesino sanguinario, pero ante todo cortés y educado decide ayudarla para reparar el grave agravió cometido por el reclusa, y no sólo accede a llenar la encuesta que demanda, sino que además le adelanta un gentil regalo de San Valentín que encontrará en el coche de un antiguo paciente, al que el propio Hannibal habría asesinado.

Animada por Jack Crawford sigue la pista del psiquiatra hasta encontrar en una bodega abandonada el auto indicado, junto a algunas tarjetas de San Valentín y una cabeza puesta en conserva.

Aferrándose al hecho de que Hannibal ha dado información real a Clarice, Crawford intenta obtener nueva información a través de ella que le ayude a dar con el asesino en serie Búfalo Bill, sobretodo después de que la apuesta sube, cuando la hija de la senadora es secuestrada.

Mi opinión

Hay una nueva serie de 2013 sobre Hannibal, no la he visto y no me llama particularmente la atención, pero lo menciono por los que prefieran este formato... Sin embargo la película sí que la he visto un par de veces, y ¿quién no? Un peliculón de aquellas épocas con actuaciones sublimes y un trabajo en general muy logrado para las limitaciones con las que contaba el cine.

Me decidí a leer este libro de Thomas Harris recordando nítidamente a Anthony Hopkins en el papel del canival, pero poco más, puesto que les repito mi memoria es muy mala, por lo que la historia vino a resultarme muy fresca aún cuando años atrás ya la había disfrutado.

Es una novela policíaca que atrapa desde el comienzo hasta el final, donde cada uno de los personajes se nota bien construido y muy humano. No tenemos a la súper heroína sino más bien a la chica que se esfuerza por hacerlo bien en su trabajo, más aun cuando va con la ilusión e inocencia de quien va a unirse recién a las fuerzas laborales y la poca experiencia que le provoca meterse en unos cuantos líos de los cuales logra salir gracias a Crawford.

Cada personaje tiene su historia detrás y podemos conocerla a través de las páginas, hay motivaciones, amores, anhelos y esperanza; o en contrapartida traumas, deseos y una inteligencia perturbadora. Sin embargo, todos ellos tienen características humanas que los hacen identificables, bueno quizá no tanto los asesinos, pero llegas a conocerlos y entender un poco qué es lo que están haciendo, aunque obviamente no logras cogerles ni cariño ni a empatizar con ellos... vamos que ya sería un poquito de pensarse el llegar a sentirse identificados con Búfalo Bill o con el mismo Lecter. Pero de que se disfrutan, se disfrutan, al punto de haberme vuelto fan de Tom Harris y ya tener preparado el segundo libro de esta serie, que más bien vendría a ser el primero, puesto que, aunque Lecter en esta trama es un poderoso secundario, pasa a adueñarse de la saga y en el libro que me dispongo a leer ahora se habla de sus orígenes.

Quizá no haya tanto misterio o suspenso porque en fragmentos aún sin conocer la identidad de Búfalo Bill ya lo vamos acompañando, lo mismo que al resto de los personajes, más bien la magia de esta novela está en acompañar a la protagonista a reunir pistas que a veces el lector ya conoce, pero que la llevan a la resolución de este caso en particular. ¿Y qué decir de las escenas de acción? Fascinantes.

En conclusión si te gusta la novela policíaca, no puedes perderte esta extraordinaria narración de Tomas Harris. Respecto a la película, les hablaré de las sutiles diferencias con el libro en un próximo vídeo, pero ya les adelanto que si no la han visto también es muy recomendable.

Ahora déjenme saber ustedes en los comentarios si han leído este libro, visto la película o si me recomiendan ver la serie, cosa que no creo porque la verdad con los libros tengo suficiente y dejan el listón muy alto.

Thomas Harris. Nación en Estados Unidos el 11 de abril de 1940. Se licenció en lengua inglesa, mientras estaba en la universidad trabajó como reportero en el periódico local, donde cubrió los casos de sucesos policiales. Su novela más famosa es The Silence of the Lambs (El silencio de los corderos, 1988), cuya adaptación al cine en 1991, con título homónimo, fue nominada a los Premios Óscar de 1991 en siete categorías, de las cuales obtuvo los cinco principales galardones.